La prisión de Lantin, la más grande de Bélgica, ubicada cerca de Lieja, fue el foco de un escándalo sexual que inició una investigación interna. Según reportan medios como Sudinfo, Daily Mail y Fox News, al menos 10 guardias y empleados están implicados en actividades sexuales indebidas, incluyendo la organización de orgías después de horas de trabajo y relaciones sexuales durante sus turnos laborales en prisión.
Se mencionó a una trabajadora, identificada como “S”, como una figura central en el escándalo, ya que una fuente anónima la describe como una “ninfómana” y que presuntamente exigía sexo a sus compañeros para poder desempeñar sus funciones laborales. Sin embargo, la situación escaló al punto de que “S” habría utilizado la oficina de un alto funcionario de la prisión para llevar a cabo encuentros sexuales con diferentes empleados: “A partir de las 06:00 horas de la mañana, hacía saber que si no tenía relaciones sexuales no podría trabajar", declaró la fuente anónima.
De lieveling van Lantin pic.twitter.com/g91DHUlGoE
— tScheldt (@tscheldt) November 15, 2023
La contratación de “S” generó interrogantes, especialmente debido a su conexión familiar con un recluso sentenciado por asesinato, y su transición de visitante a funcionaria de la prisión dejó con sospechas a muchos.
Como respuesta a estas revelaciones, las autoridades de la prisión tomaron medidas preventivas, incluyendo la restricción de acceso al propietario del jacuzzi donde se llevaron a cabo las orgías y el traslado de “S” al ala femenina de la prisión con el fin de “calmar sus impulsos sexuales”. La investigación oficial está en curso, con la posibilidad de sanciones disciplinarias para los implicados.
Lantin es conocida como una instalación de mínima seguridad que alberga a prisioneros de ambos sexos, y su diseño está inspirado en modelos estadounidenses y alemanes.
