A pesar de los esfuerzos de la Casa Real por transmitir tranquilidad sobre la salud del rey Carlos III, de acuerdo con The Telegraph su cáncer, aunque manejable, es incurable.
El monarca británico de 76 años, fue diagnosticado con cáncer el año pasado, y desde entonces mantiene una agenda activa con ciertas modificaciones. Según fuentes cercanas al Palacio de Buckingham, el rey tomó una actitud resiliente ante la enfermedad, enfrentándola "increíblemente bien".
En marzo, Carlos III fue hospitalizado debido a efectos secundarios derivados de su tratamiento médico. Sin embargo, pocos días después retomó sus actividades oficiales, incluyendo un viaje de dos días a Canadá junto a la reina Camila.
A pesar de su condición, en Londres se comenzó a planificar de manera tentativa las celebraciones para su cumpleaños número 80 que será en 2028, por lo que parece ser que la monarquía tiene confianza en que su salud se estabilizará. Aunque los expertos advirtieron que es poco probable que el rey se traslade al Palacio de Buckingham cuando finalicen las restauraciones en tres años.
El diagnóstico y evolución del estado de salud del monarca continúan siendo temas sensibles dentro del Reino Unido, donde la familia real intenta mantener una imagen de estabilidad ante la opinión pública.
